Los bilbainos tendrán que esperar al próximo año para disfrutar de la tradicional bajada.
Todo estaba listo para que la calle Zabalbide se convirtiera en un circuito. Sin embargo, la emoción, la adrenalina y el rugido de las ruedas de las goitiberas se han quedado en silencio. La lluvia ha obligado a Bilboko Konpartsak a suspender la tradicional competición por razones de seguridad.
“Ya habíamos empezado a montar el circuito y las vallas a la mañana y ya estaba chispeando un poco. Son decisiones que nos cuestan mucho, porque las goitiberas son muy importantes para nosotros pero al final los que estaban allí montando han decidido que era mejor suspenderlo”, explica Aritz Zabala, miembro de Bilboko Konpartsak.
“Más que nada por el público. Los que están a costumbrados y participan en bajadas de goitiberas estarían preparados pero hay gente que podría pasar peligro, y con el taller de los críos iba a ser complicado”, remarca Zabala. Además, desde Bilboko Konpartsak confiesan que “va a ser imposible celebrar la bajada de goitiberas otro día de esta semana, la programación está a tope”.
“Tenemos un buen disgusto, pero la seguridad es lo primero”
A la hora en la que iba a dar comienzo la bajada, Zabalbide lucía como cualquier otro día, con su asfalto mojado sin rastro de la competición. El desánimo era visible en los rostros de los más pequeños que bajaban con sus aitas por la cuesta tristes por la suspensión de la actividad. “Vinimos el año pasado y nos encantó. Hemos venido desde Vitoria pensando en pasar el día y empezar viendo las goitiberas resulta que no sabíamos que se habían suspendido por la lluvia, es una faena“, relata Daniel García, que ha acudido con su hija. Maialen Benito, ha sido otra de las personas que ha subido hasta la zona de salida, el colegio Ángeles Custodios, para ver la bajada. “Tenemos un buen disgusto, pero la seguridad es lo primero. Los chavales tenían muchas ganas, unos amigos venían desde Durango a participar y les hemos tenido que avisar”, ha subrayado Benito.
Urko Garriga – DEIA
